El IFE ya desechó material entregado por la izquierda como prueba para impugnar la elección presidencial

19/07/2012 - 2:00 pm
Ricardo Monreal, acompañado de Jesus Zambrano, Alejandro Chanona, Luis Walton y Dante Delgado

En un documento llamado “Informe circunstanciado”, el Instituto Federal Electoral (IFE) detalló que las pruebas que presentó el Movimiento Progresista sobre las presuntas irregularidades en la elección presidencial no acreditan la compra y coacción del voto, según una nota que publica hoy el diario Reforma.

El informe señalado se entregó al Trife junto al expediente que el equipo de Andrés Manuel López Obrador otorgó al órgano electoral para pedir la invalidez de la elección por las diversas irregularidades en los comicios donde Enrique Peña Nieto resultó como virtual ganador.

En los argumentos que el organismo entregó al Tribunal Electoral federal, el IFE precisó que la presunta aportación de entes prohibidos a la campaña del priista es una cuestión financiera de los partidos, sin embargo consideró que no se tienen los elementos necesarios para determinar un rebase del tope de gastos de campaña de Peña Nieto.

Por  su parte, el Consejero Presidente del IFE, Leonardo Valdés, señaló que aunque las pesquisas por los casos Monex, Soriana y el presunto rebase de tope de gastos de campaña aún no concluye, no existe fundamento para que ello pudiera representar la nulidad de la elección.

“No ha sido comprobado y no puede hacer prueba plena que el otorgamiento de las tarjetas de ‘beneficios’ hayan sido con el objeto de presionar o coaccionar a los electores a emitir su voto a favor de determinada coalición y con ello se acredite la vulneración del derecho del voto libre”, resaltó.

Y agregó que de comprobarse las aseveraciones no significa que  se vulnere el resultado de la votación o se actualice alguna de las hipótesis de nulidad.

El órgano electoral indicó que las denuncias se presentaron entre el 29 de junio y el 12 de julio se encuentran en etapa de sustanciación, señala el diario.

En el informe, el  IFE reiteró que  la Unidad de Fiscalización está sustanciando 23 quejas en contra de Peña Nieto, respecto de la acusación por supuesta adquisición encubierta en tiempos de radio y televisión y medios impresos mediante comentarios que beneficiaron al candidato priista, enfatizó que se atendieron todas las quejas que se presentaron, sancionando a toda persona que contrató o adquirió tiempos en esos medios.

Sobre la utilización de encuestas para beneficiar al candidato del PRI,  rechazó que esos ejercicios sean propaganda electoral, toda vez que no forman parte de los elementos que se emplean con el propósito de presentar ante el electorado las candidaturas registradas, señala Reforma.

Respecto a la compra y coacción del voto, se señala que dentro de las 6 mil 294 pruebas aportadas por la coalición, 4 mil 123 están relacionadas con procesos distintos al de la elección presidencial y se trata de propaganda de otros candidatos, por lo que sólo tomó en cuenta 2 mil 171 pruebas que, señala, carecen de valor probatorio.

Añadió que se entregaron como pruebas 495 documentos elaborados a mano, 507 elaborados por medio electrónico, 108 formatos que denominan “inscritos de incidentes” y dos denominados “inconformidad ciudadana”. Así como 18 denuncias ante el MP, pero dicha documentación no cumple con los requisitos de formalidad.

En relación con las 2 mil 435 tarjetas Soriana, el IFE resalta que no hay elementos que hagan evidente que hayan sido recibidas y condicionadas a cambio del voto. Asimismo, añade que sobre la falta de certeza en las casillas de votación, no se aporta ningún medio de prueba.

Leonardo Valdés puntualizó que la sola existencia de las tarjetas Soriana y los monederos de Monex, presentados como prueba en el recurso de impugnación, no revela que éstos fueran entregados para obtener el voto.

“No existe la certeza de que efectivamente las mismas hubieran sido recibidas por los medios que ellos refieren y su simple existencia no revela tampoco que su entrega haya sido condicionada, bajo qué supuesto y menos aún que contuviera dinero”, según el texto.

El IFE refiere que en el supuesto caso de que las pruebas presentadas por la coalición comprobaran que se presionó al electorado, no necesariamente reflejan que ello determinara el resultado de la votación.

 

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